Si te gustan las paredes de ladrillo visto aprovecha una buena reforma para dejarlos al aire. Y descubre otras opciones como el papel pintado con efecto de ladrillo.
Los materiales de construcción como el ladrillo pueden cumplir una función estética. Dependiendo de la manera en que se presente en los interiores así será la combinación que se haga, de ahí la aportación decorativa de las propias estructuras. Por eso, queremos mostrarte las cualidades de las paredes de ladrillo visto.
¿Estilo industrial o rústico? Según se trabajen los recursos mobiliarios y los colores así será el estilo de los interiores. De todas formas, debemos valorar la idea de que utilizar otros medios. Un claro ejemplo puede ser el papel pintado, el cual puede tener un acabado parecido. Es fácil de colocar y, aparentemente, se refleja una idea muy semejante respecto al material original, ideal si se quieren revestir baños y cocinas.
LADRILLO VISTO PARA LOS INTERIORES
Generalmente, solemos cubrir las paredes con pintura o yeso y ocultar, así, el propio material. Sin embargo, ¿por qué no dejar los materiales a la vista? Está ganando un gran recorrido el ladrillo visto, especialmente en las viviendas modernas y contemporáneas, tal y como se puede encontrar en los pisos de ciudad, en las casas de campo o en un loft industrial.
A su vez, el ladrillo visto tiene una particularidad: refleja cierta informalidad y una manera distinta de conseguir cierta originalidad en la presentación. Al fin y al cabo, existen otras posibilidades que pueden resultar interesantes con el simple hecho de dejar a la vista el material. En este sentido, no debemos olvidarnos del toque rústico que nos recuerda a las casas de los pueblos.
COMBINACIONES Y TIPOLOGÍAS
El ladrillo se puede trabajar de diferentes maneras. Una opción es que lo dejemos con su color natural, ya que ofrece calidez y cierta naturalidad. Una casa de ladrillo y madera queda muy bien, lo mismo que con paredes en blanco. Además, no importa el espacio donde utilicemos este material; de hecho, en salones y dormitorios queda muy bien, pero si queremos darle mayor dinamismo a la cocina, puede ser un diseño muy interesante.
Por otro lado, está la posibilidad de aplicar pintura y que queden los ladrillos en blanco. En realidad, es otra forma de transmitir más elegancia y depurar los ambientes. De una forma u otra se consigue una apariencia rústica o un diseño industrial, según nos convenga.
Las siguientes imágenes muestran diferentes ejemplos de viviendas con paredes de ladrillo visto. Esta opción está siendo muy recurrente por los interioristas y, por supuesto, se convierte en una apuesta segura y atrevida que ayuda a embellecer los espacios.

Tras la remodelación de la vivienda, se creó una estancia compartida para el salón, el comedor y la cocina abierta. A su vez, se recuperó la pared de ladrillo original de la vivienda. Una idea de Libertad Díaz, diseñadora de interiores.

En este caso, el ladrillo visto se pinta en color blanco para integrarlo totalmente en el espacio. Se disfruta de la textura y rugosidad del acabado pero con la amplitud y luminosidad que concede el color blanco. en ese frente, solo un espejo y un aplique luminoso B.





El ladrillo visto se adapta bien a cualquier estilo y con los complementos adecuados es posible crear el ambiente deseado con una pared muy versátil y estilosa.





